“Cuando
respiramos profundamente, es fácil sentir lo bueno que es el mundo, lo justo y
lo hermoso. Estamos inspirados. Qué trágico es, entonces, que tan pocas
personas respiren libremente y bien“. Alexander Lowen
¿Cómo aprender a relajarnos? I
Es común que todos tengamos momentos en que nos
sentidos preocupados o estresados y esto tiene repercusiones directas sobre
nuestro estado de salud pues se ve afectado el sistema de defensas del cuerpo
entre otros.
Por ello hoy te proponemos un sencillo ejercicio
basado en la respiración. Si has visto a un bebé recién nacido seguramente has
notado como su abdomen se mueve con cada respiración pero los adultos olvidamos
respirar de esta forma y solemos tener una respiración muy superficial; sin
embargo, respirar bien es una poderosa herramienta para el control del estrés o
ansiedad y es la base para aprender a relajarse.
Lo primero que
debes hacer es encontrar un sitio tranquilo y cómodo donde puedas recostarte y
nadie vaya a interrumpir y si deseas puedes poner música suave.
Una vez te encuentres acostado ubica las manos sobre
tu vientre y respira intentando llevar el aire a tu abdomen como si estuvieras
inflándolo y luego suelta el aire; de esta forma, tus manos se deberían mover y
tus hombros permanecer sin moverse. No te preocupes si no lo logras en el
intento, es cuestión de práctica.
Una vez puedas llevar el aire hacia tu abdomen, cada
vez que respires cuenta lentamente hasta 4 mientras estas tomando el aire,
luego hasta 3 mientras lo retienes y de nuevo hasta 4 mientras sueltas el aire
por la boca y así con cada respiración. Recuerda hacerlo muy lento pues la idea
es que sean respiraciones profundas y pausadas para que tu cuerpo y tu mente
bajen su ritmo y te sientas relajado.
Repite este ejercicio hasta que seas capaz de
realizarlo con naturalidad; es recomendable que lo hagas todos los días pues te
ayudara a mantenerte tranquilo por más tiempo.